Libro encomiásticamente recomendado
Prólogo de S.E.R. Giácomo Cardenal Biffi
uando un muchacho, educado cristianamente por la familia y la comunidad parroquial, a tenor de los asertos apodícticos de algún profesor o algún texto empieza a sentir vergüenza por la historia de su Iglesia, se encuentra objetivamente en el grave peligro de perder la fe. Es una observación lamentable, pero indiscutible; es más, mantiene su validez general incluso fuera del contexto escolástico.
Aquí tenemos un problema pastoral de los más punzantes; y sorprende constatar la poca atención que recibe en los ambientes eclesiales.
Para salvar nuestra alegría y orgullo de pertenecer al «pequeño rebaño» destinado al Reino de Dios, no sirve la renuncia a profundizar en las cuestiones que se plantean. Es indispensable, por el contrario, la aptitud para examinar todo con tranquila ecuanimidad: en oposición a lo que comúnmente se piensa, la escéptica cultura contemporánea no carece de cuentos, sino de espíritu crítico; por eso el Evangelio se encuentra tan a menudo en posición desfavorable.
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Para leer el prólogo completo haga click sobre la portada del libro.
Aquí tenemos un problema pastoral de los más punzantes; y sorprende constatar la poca atención que recibe en los ambientes eclesiales.
Para salvar nuestra alegría y orgullo de pertenecer al «pequeño rebaño» destinado al Reino de Dios, no sirve la renuncia a profundizar en las cuestiones que se plantean. Es indispensable, por el contrario, la aptitud para examinar todo con tranquila ecuanimidad: en oposición a lo que comúnmente se piensa, la escéptica cultura contemporánea no carece de cuentos, sino de espíritu crítico; por eso el Evangelio se encuentra tan a menudo en posición desfavorable.
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2 comentarios:
Porque soy Católico y Creo que el pecado existe HAY que reconocer los abusos que personajes valiéndose de la Santa Iglesía Católica perpetraron a lo largo de su Historia.
Es verdad que muchas fueron exageraciones del enemigo, pero saquear y asesinar a muchos pueblos (incluido cristianos) en camino a las cruzadas.
O matar y saquear a los judios con la excusa del Deicidio (remember Reyes Católicos). -Yo no odio a los judios, me interesa más convertirlos-
La verdad a medias es faltar a la verdad y cometer pecado.
No hagamos lo mismo que el enemigo.
Amigo mío:
Los errores no los reivindica nadie.
De lo que se trata, es de reconocer el espíritu de evangelización de la Conquista española.
Pruebas al canto, relea la vida de San Francisco Solano, y las de los mártires de las reducciones jesuíticas.
El reto es polvo y paja, no se deje engañar.
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