Este blog está optimizado para una resolución de pantalla de 1152 x 864 px.

Fragmento de Notre charge apostolique. S.S San Pío X (1910)
"No, Venerables Hermanos -preciso es reconocerlo enérgicamente en estos tiempos de anarquía social e intelectual en que todos sientan plaza de doctores y legisladores-, no se edificará la ciudad de modo distinto de como Dios la edificó; no se edificará la ciudad si la Iglesia no pone los cimientos y dirige los trabajos; no, la civilización no está por inventar ni la "ciudad" nueva por edificarse en las nubes. Ha existido y existe; es la civilización cristiana, es la "ciudad" católica. No se trata más que de establecerla y restaurarla sin cesar sobre sus fundamentos naturales y divinos contra los ataques, siempre renovados, de la utopía malsana, de la rebeldía y de la impiedad: Omnia instaurare in Christo."

21 de julio de 2009

21 de Julio, Festividad de San Lorenzo de Brindisi, Predicador y Doctor de la Iglesia






l Santo nació en Brindis, cerca del lugar en que la bota italiana llevaría la espuela contra el Balcán turco. Era en julio de 1559. Tres semanas después, el viejo papa Paulo IV, duro campeón de la reforma católica, moría en Roma. El populacho mostraba su alegría por verse libre de su firme puño, y echó abajo la estatua del Pontífice. El recién nacido heredaría en cierto modo el celo del reformador difunto, pero sabría ser más caritativo y más flexible.


Había nacido de noble familia. Recibió en el bautismo el nombre de Julio César. Se cuenta que a los seis años predicó en la catedral y que el auditorio quedó transportado de admiración. Reduzcamos las cosas a sus justos límites, no es imposible que participara en alguna fiesta infantil, al estilo de las que tan frecuentemente vemos organizarse en las catequesis. Y nada tendría de raro que el despierto muchacho, puesto en una ocasión tal, encantara a su auditorio por el despejo y la soltura con que trataba de las verdades religiosas.


Muerto su padre, César entra en los franciscanos conventuales, y queda allí hasta la edad de catorce años. Pero ya hemos dicho cuál es el emplazamiento de Brindis. Los turcos amenazaban con su poder creciente la pequeña ciudad y César, con su madre, se refugia en Venecia, donde un tío suyo cuidará tiernamente de su formación. El adolescente no había olvidado el ideal franciscano. Y el 17 de febrero de 1575 entra en la Orden capuchina tomando el nombre de Lorenzo. Su ingreso tuvo lugar en el convento de Verona. Novicio modesto y grave, penitente hasta el extremo, cayó enfermo y hubo que retrasar su profesión. Por fin, el 24 de marzo, víspera de la Anunciación, pudo hacerla.
*****************************************
Para leer la hagiografía completa , más las de Santa Práxedes, Vírgen, San Víctor de Marsella y Compañeros Mártires y San Daniel, Profeta, haga click sobre la imagen de San Lorenzo.

0 comentarios: